La trayectoria musical que han forjado dentro del reguetón es la misma que les ha ganado un sitial del género en Latinoamérica, donde su música es aclamada por un público fiel que hace sentir a Baby Rasta & Gringo como Los duros, tal como se titulará su próximo disco.
Así lo comprueban en cada viaje que realizan, como el más reciente a Guatemala, donde no se presentaban hacía siete años y la fanaticada no sólo tarareó sus canciones, sino que también los tongoneó con muestras de cariño desde su arribo al aeropuerto.
El binomio formó parte de cuatro conciertos en las ciudades de San Marcos, Mazatenango, Chiquimula y la capital, Ciudad de Guatemala, como teloneros de una gira de una famosa bebida gaseosa, en la que también las acompañó el grupo panameño Los Rabanes y el cantante guatemalteco Gánster. “No hay descanso, sino mucho trabajo. Es increíble el auge que tenemos en Latinoamérica. Es impresionante ver cómo el pueblo te quiere tanto fuera de Puerto Rico y corean las canciones”, cuenta Gringo en entrevista con Primera Hora.
El artista agrega que una manera de mantener un contacto directo con sus seguidores es “lanzarme al público (en los shows), porque se emocionan al tener la oportunidad de tocar a uno, aunque los promotores se ponen nerviosos de que pase algo”.
Para Wilmer Alicea, nombre real de Baby Rasta, tanto él como su compañero musical se encuentran en una etapa en la que “no muchos artistas retoman su trono y logran enamorar oídos nuevos”. Señala que “hay una emoción muy grande en cada país que vamos y para nosotros es algo bonito, un privilegio y una bendición de Dios lo que nos está pasando”.
Gringo, asimismo, indica que a través de redes sociales como Facebook y Twitter mantienen informados a sus fans sobre su agenda de presentaciones. “En Chile, Venezuela y Colombia nos están pidiendo (un show) y todavía no hemos visitado a Argentina y también quieren que vayamos”, acota Samuel Gerena, mejor conocido como Gringo.
Aconsejan a jóvenes
Tras Baby Rasta sobrevivir a una balacera en marzo de 2010, desea servirles de inspiración a los jóvenes para que busquen de Dios como él lo ha hecho. Por eso, en sus presentaciones, no pueden faltar los consejos a su público.
“Tengo mis momentos íntimos con Dios y no abundo tanto sobre eso que me sucedió ni pienso en eso, porque estoy enfocado en mi carrera y en disfrutarme a mi público”, sostiene el vocalista. Es consciente que, tras verse entre la vida y la muerte, “es un privilegio poder respirar y estar parado, y se lo agradezco a Dios”.
Gringo, por su parte, añade que “como parte de nuestro show aconsejamos a los jóvenes a buscar de Dios y al decirles eso a 3,000 o 10,000 personas, aunque sea un porciento pequeño al que le lleguen las palabras, ya es algo bueno”.
Acto seguido, Baby Rasta señala que “le decimos al público que me ve en tarima que por yo estar ahí, ya es un milagro de Dios”.
